¡Descubre el Rubor Líquido que Transformará tu Look en 10 Segundos! Cada bolsa de maquillaje necesita algunos productos básicos: un corrector eficaz, un tubo de rímel, bálsamo labial y, por supuesto, ¡rubor! Este producto milagroso es esencial durante todo el año porque puede transformar instantáneamente tu rostro y tu maquillaje, dándote una variedad de estilos. Ya sea en crema, polvo o bálsamo, hay un universo de fórmulas y acabados por explorar. Si eres una experta en recrear esos looks virales como el del “novio sonrojado”, es hora de subir de nivel con la última sensación: el rubor líquido.
¿Qué es el Rubor Líquido?
Al igual que las fórmulas en crema, los rubores líquidos tienden a ser ultrapigmentados. Pero cuidado: si te excedes, puedes terminar con un look más atrevido de lo que esperabas. ¡Sin mencionar que el pincel incorrecto puede dejarte un aspecto irregular! Sin embargo, cuando se aplica correctamente, el rubor líquido puede crear un resplandor suave que es realmente hermoso. “Los rubores líquidos están diseñados para aplicarse y difuminarse fácilmente; como se secan rápido, se adhieren a tu piel para un uso duradero”, explica Brittany Leslie, maquilladora de celebridades.
¿Por Qué Deberías Probar el Rubor Líquido?
Con las principales tendencias de rubor de este año, el rubor líquido está aquí para quedarse. Para ayudarte a dominar este arte, hemos consultado a dos de los principales expertos en la industria para sus consejos profesionales. A continuación, comparten sus secretos sobre cómo elegir el rubor líquido perfecto y cómo aplicarlo para un look natural y radiante.
1. Elige la Fórmula Correcta
Comprar rubores líquidos puede parecer abrumador. A diferencia de los polvos, puede ser difícil evaluar la consistencia y la saturación del producto. Así que haz una pequeña prueba antes de comprarlo, igual que harías con un producto para la piel. “Busca fórmulas que se mezclen bien con tu base”, aconseja Ana Tamayo. Los rubores líquidos pueden crear un hermoso resplandor si la fórmula se complementa con tu maquillaje.
2. Diviértete con los Colores
Una vez que encuentres una fórmula que te guste, comienza la verdadera diversión. El arcoíris de tonos puede ser tentador, especialmente al considerar lo saturados que son. Pero, como dice Leslie, el color es solo el comienzo. “Los rubores líquidos vienen en una variedad de acabados, desde mate hasta brillante y satinado”, dice. Esto hace que personalizar tu look sea más fácil que nunca.
3. Usa las Herramientas Adecuadas
La aplicación puede ser la parte más desafiante, pero como con la mayoría del maquillaje, no te obsesiones demasiado. Tanto si eliges un pincel como tus dedos, Leslie asegura que puedes lograr el look deseado. Sin embargo, evita las esponjas. “Las esponjas suelen absorber más producto, lo que puede dejar un resultado irregular”, afirma Leslie. Por ello, recomienda usar los dedos o un pincel.
“Los pinceles son más versátiles y permiten controlar mejor la cantidad de rubor que aplicas”, añade Leslie. Entonces, ¿qué tipo de pincel deberías usar? Leslie sugiere que usar dos tipos diferentes da el mejor resultado. “Uno denso y redondeado es ideal para aplicar el producto, mientras que un pincel más esponjoso ayuda a difuminarlo perfectamente en la piel”, explica.
4. Decide Cuándo Aplicarlo
Los rubores en polvo suelen aplicarse después de la base, pero con el rubor líquido, tienes opciones. Aplicarlo ligeramente sobre la piel desnuda puede dar un aspecto natural, mientras que aplicarlo sobre la base puede ofrecer un toque de color más audaz. “Depende de la intensidad y el look que busques”, dice Tamayo. Si decides aplicar el rubor antes de la base, elige un tono brillante que cree un efecto difuminado y asegúrate de difuminarlo bien antes de aplicar la base.
5. La Colocación es Clave
Como los rubores líquidos son más saturados que los polvos, es importante considerar dónde los aplicas. Los pómulos y las mejillas son los lugares más comunes para el rubor, y ambos son ideales para el rubor líquido. “Si usas los dedos, aplica pequeños toques en el pómulo y presiónalo suavemente sobre la piel”, dice Tamayo. Para un look más intenso, aplica el producto primero en el dorso de la mano y luego en capas sobre los pómulos. “Trabaja rápidamente, difuminando el color hacia las sienes para crear un efecto suave”, aconseja Leslie.
Rompe las Reglas
Uno de los placeres del rubor es que no tiene límites. Muchas de las principales tendencias llevan el rubor más allá de las mejillas, y es aún más fácil hacerlo con una fórmula líquida. “El puente de la nariz es un lugar divertido y te da un look monocromático encantador”, comenta Tamayo. Dondequiera que elijas aplicarlo, recuerda que el rubor líquido es para divertirse. Experimenta con capas de colores para un efecto atardecer o elige un look rosado con tonos chicle como los mencionados a continuación.